Greg Abbott, gobernador de Texas, enfiló las baterías hacia el gobierno federal y calificó de "inaceptable" su respuesta ante el coronavirus, una vez se diera a conocer que una mujer salió de cuarentena antes de que diera positiva al virus.
"Lo que pasó en San Antonio y lo que hizo el Centro de Control de Enfermedades es totalmente inaceptable", dijo ante reporteros el lunes durante una conferencia en Austin sobre desarrollo económico.
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"Pareciera ser un caso de negligencia en lo que tiene que ver con cómo esta persona, que tenía el coronavirus, pudo salir del TCID (siglas en inglés del Centro de Enfermedades Infecciosas de Texas)", añadió antes de rematar con que cree que "ellos entienden la magnitud del error que cometieron".
La mujer ya había dado un resultado positivo al virus el mes pasado, cuando fue evacuada de Wuhan, China, pero salió de cuarentena el sábado luego de dos pruebas negativas. Tras su partida, el resultado de un tercer análisis arrojó un "débil positivo".
"Cualquier posible acción está siendo tomada para asegurar que su exposición a cualquiera en San Antonio sea mínima", dijo el gobernador.
En el interín, más de 120 pasajeros del crucero Diamond Princess también abandonaron la cuarentena en San Antonio; una vez se le practicó un tercer exámen.
Se supo que la mujer que dio positivo estuvo en el North Star Mall de San Anotnio y en un hotel de la ciudad.
