EL PASO, TX - La defensa del tirador de Walmart, Patrick Crusius, presentó cinco mociones en el tribunal del Distrito 409 del Condado de El Paso, argumentando que la fiscalía retuvo pruebas que podrían ser favorables para el tirador.
Crusius asesinó a 23 personas el 3 de agosto de 2019 cuando abrió fuego en la tienda Walmart de Cielo Vista e hirió a más de 20 personas. Se declaró culpable de cargos federales en julio de 2023 y fue sentenciado a 90 cadenas perpetuas consecutivas.
La defensa argumenta que los fiscales están violando la regla Brady. Esta regla se deriva de un caso de la Corte Suprema de 1963, Brady vs. Maryland, que estableció que los fiscales tienen el derecho constitucional de revelar información que pueda ser favorable para la defensa.
Los fiscales normalmente deben revelar esta información antes de la fecha límite de descubrimiento en cada caso. La fecha límite de descubrimiento en el caso de Walmart no está programada hasta el 13 de enero de 2025.
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Ahora, en este jucio estatal se está solicitando la pena de muerte para Crusius.
Según la moción, el equipo de defensa afirma que un investigador y un abogado de la oficina del fiscal de distrito Bill Hicks se reunieron con dos vecinos de Crusius en Allen, Texas, en agosto y noviembre de 2023, respectivamente.
En esas entrevistas, un vecino informó a los investigadores que Crusius no era un niño “normal” y que, a los 3 años, se golpeaba la cabeza contra la acera, tenía dificultades para comunicarse, no podía hacer contacto visual y estaba inscrito en clases de educación especial desde una edad temprana.
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El primer vecino dijo a los investigadores: “Todos en el vecindario sabían que tenía autismo”.
Un segundo vecino, que también era asistente de educación especial de Crusius, informó haberle dicho a los investigadores de la fiscalía que tenía “algún tipo de problema de formulación cerebral” y que “no estaba bien” desde que nació.
La defensa afirma que solo se enteraron de estas entrevistas durante su propia investigación cuando comenzaron a entrevistar a los vecinos del acusado.
En una segunda moción, la defensa profundizó en un argumento planteado por primera vez en la moción del mes pasado presentada en el caso. Afirman que la fiscalía interceptó 15 llamadas telefónicas grabadas por la cárcel del condado de El Paso entre el equipo de la defensa y Cruius. Esas llamadas, que comenzaron el 25 de agosto de 2020 y finalizaron el 14 de enero de 2021, supuestamente duraron tres horas y 34 minutos en total.
Durante una audiencia ante el juez Medrano el 11 de septiembre, el fiscal de distrito Bill Hicks reconoció que la fiscalía había recibido algunas de las llamadas, pero negó haber recibido 15 llamadas, como argumentó la defensa.
La defensa también solicitó que la fiscalía revelara toda la información que se pudiera descubrir sobre el caso contra Crusius recibida del caso federal. También solicitaron preservar las pruebas y revelar cualquier registro o material que estuviera "inadmisiblemente" en posesión de la fiscalía sobre las visitas del equipo de defensa al acusado en la cárcel.
