La Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos dio a conocer un caso en el que, tras una rigurosa entrevista con un inmigrante acompañado por un menor, se descubrió que no existía ningún parentesco entre ambos.
En un comunicado, las autoridades confirmaron que el menor había sido llevado a Estados Unidos anteriormente por otras personas.
Este tipo de situaciones forman lo que se conoce como “reciclaje de niños”, el cual sucede cuando un adulto migrante cruza de manera ilegal a Estados Unidos acompañado de un menor que no es su familiar y con el propósito de obtener mayor probabilidad de permanecer en territorio estadounidense.
“Hay gente trayendo menores y reclamándolos como suyos porque creen que así los vamos a liberar más fácil y entonces nosotros debemos hacer todo lo necesario para evitar que estos niños sean explotados por personas que ni siquiera son sus parientes” dijo Aaron Hull, jefe de la Patrulla Fronteriza en El Paso.
Las autoridades no descartan que quienes realizan esta práctica sean miembros de organizaciones criminales transnacionales que aprovechan fallas en el sistema de migración para cometer un fraude.
“El reto ahora va a ser que, además de proveer el cuidado y alimento a estas personas, ahora también vamos a tener que hacer estudios para saber si de verdad son familiares”, dijo Hull.
Para el abogado de inmigración, Daniel Caudillo, es importante que las autoridades migratorias tengan en consideración el tráfico de menores en la frontera.
“Son los más vulnerables de ser aprovechados por las personas que los quieren usar porque esos niños ya vienen castigados la segunda o tercera vez y ya no tienen nada que perder”, dijo Caudillo.
Según Caudillo, el castigo que pudieran recibir quienes realizan este acto de “reciclaje de niños” pudiera acabar con sus aspiraciones de conseguir asilo dentro de los Estados Unidos.
“Intentando usar un niño que no es su hijo, que no es hijo biológico nomás para obtener protección de familias aquí desafortunadamente le va a perjudicar a su caso siendo su caso de asilo perdiendo la credibilidad frente a un juez de migración y resulta en un castigo permanente”, dijo Caudillo.
Local
Por su parte, la Patrulla Fronteriza ya ha dado a conocer que se iniciará un programa piloto para tomar huellas digitales y muestras de ADN en los menores de 13 años para, así, evitar que ocurra este “reciclaje de niños”.