A medida que los estados desarrollan planes para la reapertura económica, los pediatras y otros expertos de la salud se enfocan en identificar a tiempo el cuadro sintomático del Síndrome Inflamatorio Multisistémico en Niños (MIS-C, por sus siglas en inglés), pues de esto depende un tratamiento oportuno para aminorar el efecto devastador de la afección pediátrica.
Los CDC han confirmado que el MIS-C está vinculado al síndrome respiratorio agudo severo (SARS-CoV-2). Sin embargo, hay menos casos de COVID-19 entre los niños en comparación con los adultos.
El MIS-C se ha detectado en niños de toda Europa y en al menos 18 estados de los Estados Unidos, además del Distrito de Columbia.
Según las estadísticas más recientes de los CDC, el 2% de los casos de COVID-19 se confirmó en menores de 18 años en el país.
La hospitalización es más común entre los pacientes pediátricos menores de un año y aquellos con afecciones subyacentes.
Al principio, los expertos estimaron que los casos estaban ligados a la enfermedad de Kawasaki, una afección inflamatoria rara que en general afecta las arterias principales y el corazón. Pero se registraron demasiados casos para que fuera Kawasaki, entonces los médicos acordaron que era un síndrome inflamatorio diferente.
PERÍODO DE INCUBACIÓN
Si bien los datos sobre el período de incubación de COVID-19 en la población pediátrica son limitados, los CDCA estiman que esta se extiende durante 14 días, de manera similar a los pacientes adultos con COVID-19. En China, los pediatras reportaron un periodo de incubación de 2 a 10 días.
CUADRO SINTOMÁTICO
Los pacientes pediátricos con COVID-19 pueden experimentar los siguientes síntomas a lo largo de la enfermedad:
Fiebre
Tos
Congestión nasal o rinorrea
Dolor de garganta
Dificultad para respirar
Diarrea
Náusea o vómito
Fatiga
Dolor de cabeza
Dolor muscular
Poco apetito
Los síntomas predominantes de COVID-19 registrados hasta la fecha por los CDC entre todos los pacientes pediátricos son similares a otras infecciones respiratorias virales. Aunque estos síntomas suelen manifestarse en cualquier momento durante el curso general de la enfermedad, los niños con COVID-19 pueden no presentar fiebre y tos al inicio.
Un informe que documentó el desarrollo de la enfermedad en nueve bebés hospitalizados en China indica que solo la mitad presentó fiebre.
Los síntomas gastrointestinales, que abarcan dolor abdominal, diarrea, náusea y vómito, se presentó en una minoría de pacientes adultos. En un caso pediátrico de COVID-19, la diarrea fue el único síntoma reportado, precisó la agencia.
Hasta la fecha, los CDC han recibido múltiples informes de niños infectados que no presentan síntomas. Un estudio reciente encontró que 13% de los casos eran asintomáticos.
A partir del 2 de abril de 2020, los bebés menores de 1 año representaron el 15% de los casos pediátricos de COVID-19 en el país.
Asimismo, desde esa fecha se han confirmado tres muertes de niños asociadas a SARS-CoV-2, aunque no se sabe con exactitud cómo actúa la enfermedad en menores.
AVANCES EN LA INVESTIGACIÓN DEL MIS-C
Los CDC colaboran con los investigadores del país y de otras naciones para avanzar en la investigación sobre el MIS-C, así como en el rastreo de casos.
Los pacientes con MIS-C han presentado fiebre persistente y una variedad síntomas que incluyen afectación multiorgánica (cardíaca, gastrointestinal, renal, hematológica, dermatológica, neurológica) y afección inflamatoria grave.
No todos los niños presentarán los mismos síntomas, y algunos pueden tener algunos que no figuran en los reportes recopilados por los CDC.
El MIS-C podría manifestarse semanas después de que un niño se haya infectado con SARS-CoV-2. Los médicos deben reportar los casos a los departamentos de salud locales.
TRATAMIENTO Y PREVENCIÓN
En la actualidad no hay medicamentos específicos aprobados por la FDA para el tratamiento o la prevención de COVID-19.
Existe poca información sobre qué afecciones subyacentes en los niños pueden aumentar el riesgo de infección o la gravedad de la enfermedad. Los pacientes de todas las edades, incluidos niños y adolescentes con ciertas afecciones médicas subyacentes (como enfermedad pulmonar crónica o asma moderada a grave, afecciones cardíacas graves, afecciones inmunocomprometidas, obesidad severa, diabetes, enfermedad renal crónica) pueden estar en mayor riesgo.
La Organización Mundial de la Salud publicó pautas para el tratamiento de pacientes adultos y pediátricos con COVID-19 en el entorno hospitalario o en la Unidad de Cuidados Intensivos.
AVISO EMITIDO POR LOS CDC A LOS MÉDICOS
Los profesionales de la salud deben considerar los siguientes factores:
- Una persona menor de 21 años que presenta fiebre, evidencia de inflamación según laboratorio y evidencia de enfermedad severa que requiere hospitalización, con compromiso multisistémico (más de dos) de órganos (corazón, riñón, renal, respiratoria, sanguínea, gastrointestinal, dermatológica o neurológica).
- No hay diagnósticos alternativos posibles, por ejemplo, mediante pruebas se descarta influenza u otra enfermedad respiratoria.
- El paciente da positivo para la infección de COVID-19 dentro de las 4 semanas previas al inicio de los síntomas.
- Fiebre por encima de 38° C durante 24 horas o más.
- Análisis de sangre anormales que incluyen: una proteína C reactiva (PCR) elevada, velocidad de sedimentación globular (VSG), fibrinógeno, procalcitonina, dímero-d, ferritina, ácido láctico deshidrogenasa (LDH) o interleucina 6 (IL-6), neutrófilos elevados, linfocitos reducidos y baja albúmina
- Algunas personas pueden cumplir criterios completos o parciales para la enfermedad de Kawasaki, pero deben ser informados al Departamento de Salud si cumplen con la definición de caso para MIS-C.
- El médico debe considerar MIS-C en cualquier muerte infantil con evidencia de infección por SARS-CoV-2.